martes, 2 de febrero de 2010

Alerta-alterego.

Llevaba un par de semanas - que bien podría haber sido años- aguantando las extrencidades de la extrovertida Marioneta. No podía soportar ni un minuto mas aquella situación.
Por eso la Titiritera, que jamás perdía los nervios y que siempre encontraba razones obvias para todo le espeto un día a bocajarro:

- !¿Por qué no cierras de una vez esa estúpida boca de madera?¡
¿Es que no te das cuenta de que tu impaciencia va a acabar por volvernos locas?
¡ Son esas inútiles ganas de Amar tan tuyas las que siempre acaban por enredar todos los hilos¡ ¿Que pasará cuando no nos quede otra opción más que la de cortar el nudo?
¿QUE HARÁS CUANDO TU ANHELO NOS DESTRUYA?.- Comentó la exasperada Titiritera.

- ...

No supo que responder. Ante la falta de palabras decidió dejar de tensar los lazos que la unían a las manos de su anfitriona. Comprendió que no podría contadecirla y se encerró a si misma lo mas lejos que pudo dejandose envolver por su espíritu de pino y fresno. Guiada por la cruz de madera, el único nexo que siempre guardó con la realidad.
Y tanto quiso callar que selló sus labios y convirtiose en aquello que siempre debió haber sido.
Calló para siempre.

2 comentarios:

  1. Me ha fascinado.

    Pobre muñeca de madera, quizá debió dejar que se cortaran los hilos, para ser más ella y no perder su esencia, que al fin y al cabo es lo único que realmente nos pertenece.

    Un beso, te debo más de un comentario T.T, pero la facultad me tiene consumida.

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  2. No debió callarse, ¿no crees?

    XxX

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